
Entré
y detrás de la puerta
un llanto revelaba
la cercanía de todos los finales,
la angustia de lo irremediable,
el aullido que nace
al perecer la última esperanza.
Un llanto como un aguacero,
denso y rabioso,
un llanto de cría,
desconsolado,
inconsolable.
Y solo pude
llorar con él.
*La imagen es de Elodie aka LostFish