viernes, 11 de julio de 2008

LEJANA PERO HONDA II

He buscado tu rastro

en las encías de la noche.

He tocado tu luz

en algún sueño.


Allá entre la madrugada y el alba

te puse nombre

y enmudecí.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me relaja mucho leerte. Parece que estamos en tu cuarto, rodeadas de humo mágico. Tu me lees en voz alta y yo me siento especial por ser la primera que oye tus poemas. Entre risas y lágrimas la noche pasa volando..Te extraño mucho hermanamía.

Lasinverso dijo...

Lindamia añoro tu risa, tu cara de asombro, tu lúcido juicio, y que mi voz suene en voz alta. Te kiero siempre. Mi corazón jamás se distancia del tuyo.