Esta casa consigue
desencajarme a menudo,
frecuentarla poco
es la única salvación
a tanto malquerer.
Estos muros me aprietan
me arrugan
me contraen
soy alérgica
a esta cal impostada
contraria a estas corrientes
de ventanas quietas.
Aquí
todo me sabe
a tu amargura,
a la hiel de tu infancia,
y ensordezco mientras
gritan los espejos
que siguen sin mirarte,
y finjo que sonrío
y beso a los fantasmas
que jamás te abrazaron.
Esta casa me aterra,
me hastía,
me envenena,
subir o bajar
estos peldaños trampa
acaba por rasgar
siempre la misma herida,
mucho antes de que pueda
besar tus cicatrices.
1 comentario:
Esa casa es un corsé, déjala atrás, cierra la puerta, olvídala.
Me he sentido agobiada mientras leía.
Mi casa es, a pesar de alguna tristeza que en todas hay, luz y amor.
Bicos.
Publicar un comentario