domingo, 29 de junio de 2008
DE TU VOZ Y MIS ABISMOS
Leo en los diarios.
Pobre Amy
si no deja la pipa
morirá.
Su voz está sonando
en todas las emisoras del mundo,
hace equilibrios
en la barra de un bar.
Pobre Amy
la chica dura
tiene el corazón lleno de humo.
El cabello casi roza el cielo,
dulce niña mala,
hay un reguero de dólares
sobre la alfombra de tu vida,
el crak se está fumando
los confines de tu garganta.
Mi pobre Amy.
Y yo con tu voz tatuada
en mis abismos.
jueves, 26 de junio de 2008
miércoles, 25 de junio de 2008
CREADA
Soy una figurita
naciente entre tus manos.
Madera blancuzca
y resistente.
Me embistes,
te retengo,
haces de mi
la casa de tu gubia
y yo me dejo
y soy.
naciente entre tus manos.
Madera blancuzca
y resistente.
Me embistes,
te retengo,
haces de mi
la casa de tu gubia
y yo me dejo
y soy.
martes, 24 de junio de 2008
RÍO LAGARTO
Con los diente si hace falta.
Río Lagarto,
ríos sin nombre,
soy una piedra
que salta en vuestra entraña.
Resistiremos.
No aceptamos ley protectora
mientras la impunidad nos asesina.
Sed.
No quiero surco a tierra
ni la verdina seca.
Que os corra el agua,
que siempre habrá una voz
en pie de guerra
contra la mano vil
que engulle y seca.
Río Lagarto,
ríos sin nombre,
soy una piedra
que salta en vuestra entraña.
Resistiremos.
No aceptamos ley protectora
mientras la impunidad nos asesina.
Sed.
No quiero surco a tierra
ni la verdina seca.
Que os corra el agua,
que siempre habrá una voz
en pie de guerra
contra la mano vil
que engulle y seca.
LA MUJER ABRAZO
Las margaritas suben.
Y salieron del bar
y la calle era un paraje
que no recordaban haber visto jamás.
Y se movía mucho.
Y salieron del bar
y la calle era un paraje
que no recordaban haber visto jamás.
Y se movía mucho.
LA LOLA
Asomas a la vida
un guiño seductor
entre cristales,
besar felicidades
es una meta honesta,
aunque uno se resigne
a ganar solamente
de cuando en cuando
toca.
Y como si el sabor
se quedara en la boca
hasta que paladeas
instantes sibilinos,
te colmas de momentos
y escribes tu camino,
entre tus soledades
y una copa de vino.
un guiño seductor
entre cristales,
besar felicidades
es una meta honesta,
aunque uno se resigne
a ganar solamente
de cuando en cuando
toca.
Y como si el sabor
se quedara en la boca
hasta que paladeas
instantes sibilinos,
te colmas de momentos
y escribes tu camino,
entre tus soledades
y una copa de vino.
lunes, 23 de junio de 2008
DERRAMAMÉ TU IMPERIO
Me tenderé a leer
en las pecas de tus brazos,
quisiera desgajarme en tu brocha
príncipe de la sandía,
llevas entre las uñas
todos mis sueños.
en las pecas de tus brazos,
quisiera desgajarme en tu brocha
príncipe de la sandía,
llevas entre las uñas
todos mis sueños.
ESPERANZADA
Tu misterio me baña
los minutos
que me roba el reloj,
en tus brazos desgajo
la prisa de mis días,
durezas de tus manos
para mi cuerpo tierno,
enredados
mis labios de letra
en tus confines.
En tus pozos de sombra
baño mi desnudez,
hermano de la arritmia
el pecho herido,
soy un avión en llamas
forzando aterrizajes
sobre piedras nevadas,
me encuentro y me he perdido,
en las manos no hay nada,
príncipe del olvido.
He llorado mil noches
amarga indiferencia,
te vomité reproches,
te desdoblé paciencias,
ya no me quedan voces
que estrellarte,
ni espadas de palabras,
ni lunas, ni quimeras,
la esperanza se fue,
me voy con ella.
los minutos
que me roba el reloj,
en tus brazos desgajo
la prisa de mis días,
durezas de tus manos
para mi cuerpo tierno,
enredados
mis labios de letra
en tus confines.
En tus pozos de sombra
baño mi desnudez,
hermano de la arritmia
el pecho herido,
soy un avión en llamas
forzando aterrizajes
sobre piedras nevadas,
me encuentro y me he perdido,
en las manos no hay nada,
príncipe del olvido.
He llorado mil noches
amarga indiferencia,
te vomité reproches,
te desdoblé paciencias,
ya no me quedan voces
que estrellarte,
ni espadas de palabras,
ni lunas, ni quimeras,
la esperanza se fue,
me voy con ella.
YA NO TE ESPERO

Silvio Rodríguez
Ya ni te lloro.
Llorar es algunas veces implorar,
suplicar, rogar,
en un lenguaje del alma.
No vendrás,
nunca vienes,
nada habrá para mi,
ni siquiera migajas a la boca.
Suenas de lejos,
convencional, cumpliendo,
obligado a empuñar
los aparatos que detestas.
No te lloro,
llorar puede ser la rabia,
el miedo,
la nausea, el grito,
llorar puede ser un pozo,
un océano, un charquito.
No vendrás,
nunca vienes,
no te espero,
ni busco inquieta
las ventanas calladas,
ni alucino que silbas,
ni confundo tus voces
con voces del bullicio.
Ni te lloro,
llorar puede ser consuelo,
cobijo, manto,
no hay para mi.
Ya no te lloro,
ya no te espero.
domingo, 22 de junio de 2008
CASADA
Me revuelco
entre margaritas silvestres.
Estoy sola con los pájaros,
su trino es la única voz
que me alcanza,
su vuelo,
el compás que ansío.
Mastico tierra,
inhalo hierbas,
en otra vida fui
un trébol de cuatro hojas.
Hay un perro ladrando
en blanco y negro,
y una orquesta de hormigas
hace sonar
su música en mi cuerpo.
Un árbol viejo,
de raíces hondas,
pide mi corazón en matrimonio.
Paladeo su savia
y me entrego.
entre margaritas silvestres.
Estoy sola con los pájaros,
su trino es la única voz
que me alcanza,
su vuelo,
el compás que ansío.
Mastico tierra,
inhalo hierbas,
en otra vida fui
un trébol de cuatro hojas.
Hay un perro ladrando
en blanco y negro,
y una orquesta de hormigas
hace sonar
su música en mi cuerpo.
Un árbol viejo,
de raíces hondas,
pide mi corazón en matrimonio.
Paladeo su savia
y me entrego.
GABRIELA MISTRAL: PREMIO NÓBEL, POETA Y MAESTRA

La conocí de lejos. Me fue sonando aquí y allá, anidó en un oido. Cuando quise darme cuenta estaba delante de un libro de poemas suyos y sentía latir un alma blanca, inmensa, entre las manos. Gabrielamía, Gabriela Mistral nuestra (1889-1957), que vino a parir un canto de verdad y de justicia en su mundo de lucha y de palabra.
Su verdadero nombre fue Lucila Godoy Alcayaga pero con su seudónimo quiso poner de manifiesto su admiración por los poetas Gabriele D’ Annunzio y Frédéric Mistral, quien, por cierto, compartió el Premio Nobel de Literatura de 1904 con José Echegaray.
Gabriela fue un ser con una sensibilidad fuera de lo común, conectada siempre a su Chile natal, por el que no dejó de trabajar ni de levantar la voz. Poeta valiente, de palabra honda, comprometida, obtuvo el reconocimiento del mundo entero cuando en 1945 fue la primera mujer y literata hispanoamericana en recibir el Premio Nóbel de Literatura.
“Hoy Suecia se vuelve hacia la lejana América ibera para honrarla en uno de los muchos trabajos de su cultura. El espíritu universalista de Alfredo Nóbel estaría contento de incluir en el radio de su obra protectora de la vida cultural al hemisferio sur del Continente Americano, tan poco y tan mal conocido.”
Con estas palabras inició su discurso la poeta chilena, cuando el 10 de diciembre de 1945 recogía en Estocolmo de manos del Rey Gustavo de Suecia, el Premio Nóbel de Literatura.
Hay mucho que decir de esta mujer para la que la educación fue una una lucha por mejorar la formación en su país que empezó en el peldaño más sencillo, dando clases en escuelas rurales, y alcanzó a organizar los planes de educación chilenos. Brilló por sus aptitudes y actitudes docentes, que la llevaron a recorrer el mundo en un ir y venir siempre relacionado con la educación.
A Gabriela es inherente esa autenticidad que sólo algunos poetas son capaces de poseer y preservar, pese a que su estética pueda quedar dañada para algunos ojos que anteponen la perfección del verso al desgarro de la emoción sangrante. Si algo resalta en "la Mistral" es que fue ante todo ella misma. Dejó que las corrientes artísticas de la época le revolvieran el pelo, pero nunca cedió su voz a más movimiento artísitico que el que le corría por las venas.
Gabriela es grande por lo que hizo, por lo que dijo y porque tenía un lenguaje propio y puro, por encima de la estética, de las corrientes, de las modas literarias. Un universo entero y suyo, que tenía que salir y salía en palabras hilvanadas, entretegidas ramas de su ser peculiar, comprometido, atormentado y algunas veces oscuro.
Su sed por enseñar, su voz siempre firme, alta y clara, por y para América Latina y su defensa a ultranza de la igualdad, son el más claro ejemplo de su entrega y su esfuerzo. Hay una mezcla en su trayectoria personal, profesional y poética de lucha, de resistencia, un regusto a resignación, que es a la vez semilla para no rendirse.
sábado, 21 de junio de 2008
PALABRA Y GÉNERO
La combinación de la falda y la pluma ha sido a lo largo de la historia una lucha de las mujeres para poder escribir, para pasar de ser objetos de belleza a creadoras de belleza. Para ello, las mujeres no sólo tuvieron que pelear en un mundo de hombres que las miraba desde arriba, sino también contra su propia censura, contra su propio convencimiento de que lo que escribían no servía para nada. Y esto, desgraciadamente fue así hasta bien entrado el siglo XIX. En el caso español los avances que se habían conseguido se vinieron abajo con la guerra y como no, con la dictadura franquista. Pese a esto, a lo largo del siglo XX fueron muchas las que consiguieron sacar su verso a luz y penetrar en la realidad literaria con pleno derecho.
"Es harto evidente que aún en el siglo XIX la mujer carecía de todo estímulo si quería ser artista. Al contrario, la desairaban, le pegaban, la sermoneaban y la exhortaban. (...)Es una verdadera lástima que la mujer que podía escribir así, cuya mente condecía con la naturaleza y la reflexión, haya sido forzada al enojo y la amargura. ¿Pero qué podía hacer?, me pregunto, imaginando los sarcasmos y la risa, la adulación de los parásitos y el escepticismo del poeta profesional. Encerrarse en el campo, en una pieza para escribir, y ser desgarrada por la amargura, y tal vez los escrúpulos, aunque su marido fuera de lo más bondadoso y perfecta su vida matrimonial". ("Un cuarto propio". Woolf, Virginia)
Muchas veces, cuando por ejemplo estudiaba generaciones como la del 27 siempre me preguntaba: "¿No había mujeres que escribiesen en esa época?". Claro que las había, prueba de ello es el talento desbordado que en las manos tenía Ernestina de Champourcín. ¿Pero alguien estudió en el colegio a Ernestina como parte del 27, tan siquiera como contemporánea?. Pero es que además, Ernestina no fue la única mujer del 27: Concha Méndez, Rosa Chacel, Josefina de la Torre o Cristina de Arteaga, fueron plumas elegidas, exquisitas y silenciadas por la historia, que ha estado siempre en manos masculinas.
A día de hoy, la mujer y el verso siguen teniendo algunas cuestiones pendientes, como esa peculiaridad de las antologías en las que, si aparecen, nunca están equiparadas en número a los poetas varones, o esas otras antologías que recogen únicamente verso de mujeres, como si el ser humano no fuese lo suficientemente grande como para crear de forma independiente a su sexo. Con esto no niego ciertas peculiaridades en la poesía escrita por mujeres, pero en cualquier caso no creo que esas diferencias resten o sumen, simplemente existen.
Con esta sección quiero homenajear a todas las mujeres que con su verso han hecho, y hacen, posible que la voz femenina cante al mundo, en el mundo y para el mundo. Intentaré intercalar poetas de diferentes épocas y lugares, contemporáneas y anteriores. No hay más, ellas tienen la palabra.
"Es harto evidente que aún en el siglo XIX la mujer carecía de todo estímulo si quería ser artista. Al contrario, la desairaban, le pegaban, la sermoneaban y la exhortaban. (...)Es una verdadera lástima que la mujer que podía escribir así, cuya mente condecía con la naturaleza y la reflexión, haya sido forzada al enojo y la amargura. ¿Pero qué podía hacer?, me pregunto, imaginando los sarcasmos y la risa, la adulación de los parásitos y el escepticismo del poeta profesional. Encerrarse en el campo, en una pieza para escribir, y ser desgarrada por la amargura, y tal vez los escrúpulos, aunque su marido fuera de lo más bondadoso y perfecta su vida matrimonial". ("Un cuarto propio". Woolf, Virginia)
Muchas veces, cuando por ejemplo estudiaba generaciones como la del 27 siempre me preguntaba: "¿No había mujeres que escribiesen en esa época?". Claro que las había, prueba de ello es el talento desbordado que en las manos tenía Ernestina de Champourcín. ¿Pero alguien estudió en el colegio a Ernestina como parte del 27, tan siquiera como contemporánea?. Pero es que además, Ernestina no fue la única mujer del 27: Concha Méndez, Rosa Chacel, Josefina de la Torre o Cristina de Arteaga, fueron plumas elegidas, exquisitas y silenciadas por la historia, que ha estado siempre en manos masculinas.
A día de hoy, la mujer y el verso siguen teniendo algunas cuestiones pendientes, como esa peculiaridad de las antologías en las que, si aparecen, nunca están equiparadas en número a los poetas varones, o esas otras antologías que recogen únicamente verso de mujeres, como si el ser humano no fuese lo suficientemente grande como para crear de forma independiente a su sexo. Con esto no niego ciertas peculiaridades en la poesía escrita por mujeres, pero en cualquier caso no creo que esas diferencias resten o sumen, simplemente existen.
Con esta sección quiero homenajear a todas las mujeres que con su verso han hecho, y hacen, posible que la voz femenina cante al mundo, en el mundo y para el mundo. Intentaré intercalar poetas de diferentes épocas y lugares, contemporáneas y anteriores. No hay más, ellas tienen la palabra.
jueves, 19 de junio de 2008
RITOS
El teléfono ha muerto.
Exiliado mi nombre
de tu agenda,
por las cafeterías
se pierde en servilletas,
que en los parques se arrastran
a ver si las encuentras.
El teléfono ha muerto.
El cable se ha enredado
en mis muñecas,
condenando mis días
a la agónica espera,
a la pausa infinita,
a la vigilia eterna.
El teléfono ha muerto,
enciéndanle una vela.
Exiliado mi nombre
de tu agenda,
por las cafeterías
se pierde en servilletas,
que en los parques se arrastran
a ver si las encuentras.
El teléfono ha muerto.
El cable se ha enredado
en mis muñecas,
condenando mis días
a la agónica espera,
a la pausa infinita,
a la vigilia eterna.
El teléfono ha muerto,
enciéndanle una vela.
FORCEJEOS
Aquello fue un atraco
a mano armada,
no se puede saber
quien eligió primero
el banco de la plaza,
pero yo estoy de pie.
a mano armada,
no se puede saber
quien eligió primero
el banco de la plaza,
pero yo estoy de pie.
DIvisiones
Y solo es un
instante,
un vértigo que dura
lo que un sueño.
Todo se desenfoca,
la realidad
girando
tras un visor espeso.
Y todo se detiene,
las pupilas confusas
de regreso,
en la vigilia
de un momento.
instante,
un vértigo que dura
lo que un sueño.
Todo se desenfoca,
la realidad
girando
tras un visor espeso.
Y todo se detiene,
las pupilas confusas
de regreso,
en la vigilia
de un momento.
CRÉDITOS
Me debo a mi deber de colegiala,
de aprendiz confusa,
de preguntona sin remedio.
Le pedí un préstamo
para crecer a la vida,
me hipotequé los días
en un pago infinito,
pero de las tres cosas
que guardé en la mochila,
una fue un botecito pequeño
con mis sueños,
que relleno en las noches
que duermo con el ángel
que vive en el infierno.
Ruidos de cinco letras,
se repite la i,
la uve se duplica,
la erre es un zarpazo
de erre misma.
Me debo a la palabra,
mi equilibrio es un caos
con son de temporal,
asumo esta existencia,
esta naturaleza tan mísera y perfecta,
la condición de fuego y hielo,
prisionera en la esperanza,
cautiva en lo que está
más allá de la esperanza.
Me debo a mi deber
de los deberes,
a estar dejando siempre
para mañana
lo que podría hacer hoy,
a hacer hoy
lo que nunca hice ayer.
Me debo a la gran deuda
de existir,
de besar la felicidad
de cuando en cuando,
de tragar dolores,
regar esperanzas,
mal nutrir tristezas,
respirar mañanas.
Me debo a no deberme.
de aprendiz confusa,
de preguntona sin remedio.
Le pedí un préstamo
para crecer a la vida,
me hipotequé los días
en un pago infinito,
pero de las tres cosas
que guardé en la mochila,
una fue un botecito pequeño
con mis sueños,
que relleno en las noches
que duermo con el ángel
que vive en el infierno.
Ruidos de cinco letras,
se repite la i,
la uve se duplica,
la erre es un zarpazo
de erre misma.
Me debo a la palabra,
mi equilibrio es un caos
con son de temporal,
asumo esta existencia,
esta naturaleza tan mísera y perfecta,
la condición de fuego y hielo,
prisionera en la esperanza,
cautiva en lo que está
más allá de la esperanza.
Me debo a mi deber
de los deberes,
a estar dejando siempre
para mañana
lo que podría hacer hoy,
a hacer hoy
lo que nunca hice ayer.
Me debo a la gran deuda
de existir,
de besar la felicidad
de cuando en cuando,
de tragar dolores,
regar esperanzas,
mal nutrir tristezas,
respirar mañanas.
Me debo a no deberme.
martes, 17 de junio de 2008
LA LUNA ESTÁ MUY GRANDE
Regalas un silencio interminable.
Me tiendo en él,
soy una gata maullando
en una esquina,
soñante en la otra.
No llevo cascabel,
no sueno por sonar,
uno solo conserva
aquello que no atrapa,
yo llevo el sonar dentro.
Extendés tus pasos por el piso,
una estela de ruidos
va envolviendo la sed y la rutina,
sortilegio sonante,
ese sonar,
que escapa a la palabra.
Me tiendo en él,
soy una gata maullando
en una esquina,
soñante en la otra.
No llevo cascabel,
no sueno por sonar,
uno solo conserva
aquello que no atrapa,
yo llevo el sonar dentro.
Extendés tus pasos por el piso,
una estela de ruidos
va envolviendo la sed y la rutina,
sortilegio sonante,
ese sonar,
que escapa a la palabra.
lunes, 16 de junio de 2008
ADICCIONES

Solo de mirarlo
lo sentía en la boca.
Conseguir la cucharilla
fue cuestión de tiempos,
amortajar escurridores.
Por fin se acercaba,
aroma hondo
destetando anocheceres.
Ardía,
mi lengua enrojeció
y supe que por fin había llegado.
Su sabor guerreó,
conquistador de páramos,
entre mi paladar y mi saliva.
Y fue solo un momento
el sentirlo en la boca,
apenas un instante su dulzura
a saberme me supo.
AMANECERES
viernes, 13 de junio de 2008
jueves, 12 de junio de 2008
MINUTOS VISTOS
La pequeña caja que habla
tiene las entrañas llenas de cifras,
todo lo medible es alcanzable
con el libro adecuado entre las manos.
"Si hay share, hay esperanza",
se dicen los tipos de la soga
y los despachos
mientras se frotan las manos
con toallitas porcentaje.
Vendimia en los salones.
Dedos pulsando el dos, el tres,
el seis, el cinco, el veinticuatro...
manos en las que bailan
dos ratoncitos "filips" a pilas.
Un coche que vende
"espacio para sueños",
aliña la pantalla,
azuza más morralla
y desnuca corazones de sofá.
tiene las entrañas llenas de cifras,
todo lo medible es alcanzable
con el libro adecuado entre las manos.
"Si hay share, hay esperanza",
se dicen los tipos de la soga
y los despachos
mientras se frotan las manos
con toallitas porcentaje.
Vendimia en los salones.
Dedos pulsando el dos, el tres,
el seis, el cinco, el veinticuatro...
manos en las que bailan
dos ratoncitos "filips" a pilas.
Un coche que vende
"espacio para sueños",
aliña la pantalla,
azuza más morralla
y desnuca corazones de sofá.
DE CUANDO SE VIO
Se miró las manos vacías.
Las palmas anchas,
los dedos largos.
Tendría madera de pianista
pero le sobran dedos,
le falta oído.
Miró las manos solitarias,
desiertas,
las uñas mal cortadas,
salpicadas de esa tinta
que no se quita nunca.
Se vio las manos pampa,
deshabitadas,
desgastadas,
algo descoloridas,
con más lavados de la cuenta.
Al levantar los ojos,
todo estaba cubierto
de letras amontonadas,
malpuestas,
repartidas desigualmente
por aquella habitación tan blanca.
Sobre la mesa haches,
tes, uves,
equis, elles,
bajo la cama
uus, erres, enes,
entre los libros eñes, pes, iiiss,
oos, cees,
emes en la ventana.
Y se miró
Y se miró
Y se miró las manos
a ver
qué se encontraba.
Las palmas anchas,
los dedos largos.
Tendría madera de pianista
pero le sobran dedos,
le falta oído.
Miró las manos solitarias,
desiertas,
las uñas mal cortadas,
salpicadas de esa tinta
que no se quita nunca.
Se vio las manos pampa,
deshabitadas,
desgastadas,
algo descoloridas,
con más lavados de la cuenta.
Al levantar los ojos,
todo estaba cubierto
de letras amontonadas,
malpuestas,
repartidas desigualmente
por aquella habitación tan blanca.
Sobre la mesa haches,
tes, uves,
equis, elles,
bajo la cama
uus, erres, enes,
entre los libros eñes, pes, iiiss,
oos, cees,
emes en la ventana.
Y se miró
Y se miró
Y se miró las manos
a ver
qué se encontraba.
miércoles, 11 de junio de 2008
VICEVERSAS
Traidora grita el verso. informo en un diario sobre un programa para encontrar el amor. ilusos
si creeis que el alma gemela anda bajo las estrellas, en cuanto enciendan los focos florecerá en un plató. y viceversas.
si creeis que el alma gemela anda bajo las estrellas, en cuanto enciendan los focos florecerá en un plató. y viceversas.
VENTRÍLOKA
Siempre buscando otro lenguaje
para acabar hablando como todos.
Perseguir una sílaba imposible,
el tono de una voz.
Escudriñando labios,
malversando el carmín y la saliva.
para acabar hablando como todos.
Perseguir una sílaba imposible,
el tono de una voz.
Escudriñando labios,
malversando el carmín y la saliva.
lunes, 9 de junio de 2008
DISTANCIAS
ORÍGENES
DESPERTARES
Te escapas,
dejando los jarrones
llenos de margaritas putrefactas.
Tu mundo es un balancín de color,
no entiendo ya sus ritmos
ni sus manchas.
No logro recordar el día
que empecé a no recordarte,
hasta que te comió a bocados el olvido.
Se me secó el verso,
se les ahogó el sabor
a las rutinas mutantes,
a fuerza de no ser,
de ser escupitajos,
telegramáticos pedazos
de nuestras distantes vidas.
Nos hemos dicho adiós sin despedida,
somos un sueño más
que se quedó dormido.
dejando los jarrones
llenos de margaritas putrefactas.
Tu mundo es un balancín de color,
no entiendo ya sus ritmos
ni sus manchas.
No logro recordar el día
que empecé a no recordarte,
hasta que te comió a bocados el olvido.
Se me secó el verso,
se les ahogó el sabor
a las rutinas mutantes,
a fuerza de no ser,
de ser escupitajos,
telegramáticos pedazos
de nuestras distantes vidas.
Nos hemos dicho adiós sin despedida,
somos un sueño más
que se quedó dormido.
UMBILICAL
Mi boca grita
desde la sequedad
del verano de fuego,
que sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
remojarse en el agua
de tu carne.
Lamer en ti los jugos
del amor amado que ama,
beber de ti contigo
el elixir de luz y de lujuria
que hace por un instante
pensable el infinito.
Felarte despacio
del ser el néctar,
hasta quedar
deshecha de chuparte,
colmada de tu azúcar.
Mi boca sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
hasta que se tatúe
con tu sabor la lengua
y haya restos de ti
rumiándome en los dientes.
Que la saliva baje
empapando en tu esencia
la garganta,
derramando tus efluvios
en mis voces futuras,
en las palabras nuevas.
Que tu sudor arranque
los gusanos del vientre,
hasta lloverme tú
de la entrepierna,
resbalándote en gotas
por mis muslos abajo,
abriendo un horizonte
lunero en mis tobillos.
Mi boca sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
arpegiarse en el dulzor de ti,
columpiarse en el árbol
de tu cadera,
llenarse del boceto de deseo
que sólo puede ser
el deseo mismo.
desde la sequedad
del verano de fuego,
que sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
remojarse en el agua
de tu carne.
Lamer en ti los jugos
del amor amado que ama,
beber de ti contigo
el elixir de luz y de lujuria
que hace por un instante
pensable el infinito.
Felarte despacio
del ser el néctar,
hasta quedar
deshecha de chuparte,
colmada de tu azúcar.
Mi boca sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
hasta que se tatúe
con tu sabor la lengua
y haya restos de ti
rumiándome en los dientes.
Que la saliva baje
empapando en tu esencia
la garganta,
derramando tus efluvios
en mis voces futuras,
en las palabras nuevas.
Que tu sudor arranque
los gusanos del vientre,
hasta lloverme tú
de la entrepierna,
resbalándote en gotas
por mis muslos abajo,
abriendo un horizonte
lunero en mis tobillos.
Mi boca sólo quiere
nutrirse de tu fruta,
arpegiarse en el dulzor de ti,
columpiarse en el árbol
de tu cadera,
llenarse del boceto de deseo
que sólo puede ser
el deseo mismo.
sábado, 7 de junio de 2008
HOMBRE VID
Entre las manos pecosas
baila un longus,
benditos seres vivos
que aguardan paladares
tras los cristales
finos de una copa.
Sabio por viejo,
y por diablo,
sufridor,
pensador compulsivo,
adicto soñador,
encontrado y perdido.
Un lobo solitario
vendimiando placeres,
arruga calendarios,
y cata amaneceres,
un buzo en los diarios
desde que la memoria
era pequeña.
Canas en las pestañas
de los ojos de un niño,
que en aromas primeros
lejanas primaveras,
se revuelca y es tinto,
despierta y es ribera,
pero siempre
le embriaga un olor
a madera,
o a fruta
o a volcán
o aroma de centella
o a tierra de huracán.
baila un longus,
benditos seres vivos
que aguardan paladares
tras los cristales
finos de una copa.
Sabio por viejo,
y por diablo,
sufridor,
pensador compulsivo,
adicto soñador,
encontrado y perdido.
Un lobo solitario
vendimiando placeres,
arruga calendarios,
y cata amaneceres,
un buzo en los diarios
desde que la memoria
era pequeña.
Canas en las pestañas
de los ojos de un niño,
que en aromas primeros
lejanas primaveras,
se revuelca y es tinto,
despierta y es ribera,
pero siempre
le embriaga un olor
a madera,
o a fruta
o a volcán
o aroma de centella
o a tierra de huracán.
jueves, 5 de junio de 2008
EL QUE ESTOY BUSCANDO
Yo no busco un hombre
que sueñe dormido,
eso casi lo hacen
las masas de hombres.
Yo no busco un hombre
que duerma en su sueño,
yo lo busco vivo,
llorando, riendo,
amando, sufriendo,
bajando, subiendo.
Yo no busco un hombre
dormido por sueño,
busco al que pregunta,
ese que es lamento,
corazón valiente
que asesina al miedo,
ese que va solo,
el hijo del viento.
El que estoy buscando
es el que está dentro,
ese hombre tan grande,
ese tan pequeño,
el que duerme a veces,
y sueña despierto.
que sueñe dormido,
eso casi lo hacen
las masas de hombres.
Yo no busco un hombre
que duerma en su sueño,
yo lo busco vivo,
llorando, riendo,
amando, sufriendo,
bajando, subiendo.
Yo no busco un hombre
dormido por sueño,
busco al que pregunta,
ese que es lamento,
corazón valiente
que asesina al miedo,
ese que va solo,
el hijo del viento.
El que estoy buscando
es el que está dentro,
ese hombre tan grande,
ese tan pequeño,
el que duerme a veces,
y sueña despierto.
DESHIDRATADOS
Muchos venían a beber de la fuente.
Todos se iban con sed.
Era una fuente huérfana de aguas.
Todos se iban con sed.
Era una fuente huérfana de aguas.
TROPECISTA

Buscarte es encontrar
sucesiones de muros en todas direcciones,
absurdos edificios sin ventanas ni puertas,
levantados por la inercia
superviviente de la ciudad.
El callejero que me dieron se ha perdido,
las calles han salido corriendo por los bordes,
las plazas se han cambiado el nombre,
ahora, todas se llaman del olvido.
Mis ojos frenéticos recorren las aceras
hasta caer rendidos
en el aburrimiento
de mirar y mirar,
de mirar y no verte.
Reclaman a las farolas más luz,
pero los árboles se quejan
porque los pájaros no pueden dormir
y pían hasta gemirle la savia al viento.
Me redimo en el pulso
de mi brújula loca
que rezuma resignación
y tararea canciones suscritas
a letras amnésicas que invento.
Soy una exploradora
de callejones negros,
aventurera de avenidas cortadas,
de bule-bares sin salida.
Rastreo animal por los rincones.
Yo persigo el fantasma de tu olor,
yo persigo un murmullo salido de tu boca,
yo persigo al dragón de tus costillas por dentro.
Me descubro con el pecho en absoluto desuso,
abandonada toda esperanza de encontrarte,
tu imagen se desvanece
ante mis párpados rotos,
arrojados al purgatorio de la ausencia.
Nada hallé,
con todo he tropezado,
salvo contigo.
sucesiones de muros en todas direcciones,
absurdos edificios sin ventanas ni puertas,
levantados por la inercia
superviviente de la ciudad.
El callejero que me dieron se ha perdido,
las calles han salido corriendo por los bordes,
las plazas se han cambiado el nombre,
ahora, todas se llaman del olvido.
Mis ojos frenéticos recorren las aceras
hasta caer rendidos
en el aburrimiento
de mirar y mirar,
de mirar y no verte.
Reclaman a las farolas más luz,
pero los árboles se quejan
porque los pájaros no pueden dormir
y pían hasta gemirle la savia al viento.
Me redimo en el pulso
de mi brújula loca
que rezuma resignación
y tararea canciones suscritas
a letras amnésicas que invento.
Soy una exploradora
de callejones negros,
aventurera de avenidas cortadas,
de bule-bares sin salida.
Rastreo animal por los rincones.
Yo persigo el fantasma de tu olor,
yo persigo un murmullo salido de tu boca,
yo persigo al dragón de tus costillas por dentro.
Me descubro con el pecho en absoluto desuso,
abandonada toda esperanza de encontrarte,
tu imagen se desvanece
ante mis párpados rotos,
arrojados al purgatorio de la ausencia.
Nada hallé,
con todo he tropezado,
salvo contigo.
miércoles, 4 de junio de 2008
PÉRDIDAS
Queriendo llevarlo todo siempre,
hay algo que nunca me aparece,
que siempre ando buscando,
que persigo en el vuelo
de mis alas de escarcha,
en la danza maldita
de mi paso de fuego.
Creo que lo he cogido,
y no lo llevo,
revuelvo mis bolsillos,
mi mano hastía frenética
de la mochila el fondo,
pero ni rastro hay
de aquello que creía
que llevaba conmigo.
Sin saber bien qué es
en visiones fugaces
lo invento, lo imagino,
en el convencimiento
de saber que lo tengo
me topo con mi sino,
lo tenía entre los dedos,
lo rocé,
lo acaricié y lo supe,
lo extravié en el camino.
hay algo que nunca me aparece,
que siempre ando buscando,
que persigo en el vuelo
de mis alas de escarcha,
en la danza maldita
de mi paso de fuego.
Creo que lo he cogido,
y no lo llevo,
revuelvo mis bolsillos,
mi mano hastía frenética
de la mochila el fondo,
pero ni rastro hay
de aquello que creía
que llevaba conmigo.
Sin saber bien qué es
en visiones fugaces
lo invento, lo imagino,
en el convencimiento
de saber que lo tengo
me topo con mi sino,
lo tenía entre los dedos,
lo rocé,
lo acaricié y lo supe,
lo extravié en el camino.
MUTILACIONES
A algunos hombres
les arrancaron el sueño
y les hicieron creer
que sólo eran la sombra
del sueño que soñaron una vez.
les arrancaron el sueño
y les hicieron creer
que sólo eran la sombra
del sueño que soñaron una vez.
martes, 3 de junio de 2008
MIRANDO AL MAR

Hay una mujer sin piernas
sentada en el borde
de un banco de hierro
frente a la playa.
Hace tanto calor,
cascadas de sudor le caen
desde el cabello a la cintura.
Hay pájaros enmudecidos
revoloteando frenéticos
sobre su cabeza.
Espuma guerreando con la orilla,
ella quisiera ser
sólo un grano de arena.
Huele a mar,
azul, verdoso, viviente,
salado y peleón.
El sol esta furioso
o pletórico,
nunca se sabe,
pero abrasa.
Bucea silenciosa en el calor,
quiere ser una ola
que va y viene.
Pero está ahí
sentada sobre el banco,
quieta,
sin piernas.
sentada en el borde
de un banco de hierro
frente a la playa.
Hace tanto calor,
cascadas de sudor le caen
desde el cabello a la cintura.
Hay pájaros enmudecidos
revoloteando frenéticos
sobre su cabeza.
Espuma guerreando con la orilla,
ella quisiera ser
sólo un grano de arena.
Huele a mar,
azul, verdoso, viviente,
salado y peleón.
El sol esta furioso
o pletórico,
nunca se sabe,
pero abrasa.
Bucea silenciosa en el calor,
quiere ser una ola
que va y viene.
Pero está ahí
sentada sobre el banco,
quieta,
sin piernas.
BOMBAS
Entre los dedos blancos,
en las palmas vacías,
quedó incrustada la metralla.
El amor había saltado por los aires
allí mismo,
justo cuando creía
tocarlo con las manos.
en las palmas vacías,
quedó incrustada la metralla.
El amor había saltado por los aires
allí mismo,
justo cuando creía
tocarlo con las manos.
ATRAPADO
Se le ha enganchado el ala
en un umbral,
por más que se retuerce
no se suelta,
el pico no le suena
y solo piensa
que una mano lo quiera rescatar.
Pero todos los mancos
viven en esta calle.
en un umbral,
por más que se retuerce
no se suelta,
el pico no le suena
y solo piensa
que una mano lo quiera rescatar.
Pero todos los mancos
viven en esta calle.
DESCAMPAO
Falsos trigos
asintiendo al rugir
veloces carreteras.
El sol lo ha secado todo.
Trinos alucinógenos
alumbran los hierbajos amarillos.
Soy hija de esta tierra recalentada.
Chatarra como piezas de museo,
hay arte en este aire
que malhuele a puerto.
asintiendo al rugir
veloces carreteras.
El sol lo ha secado todo.
Trinos alucinógenos
alumbran los hierbajos amarillos.
Soy hija de esta tierra recalentada.
Chatarra como piezas de museo,
hay arte en este aire
que malhuele a puerto.
NUNCAS
Sólo te querré
cuando seas regazo,
puerta,
fuego.
El piso está vacío,
silenciosas sombras
bordeándome las sienes.
Y este gato loco
sigue intentando
pronunciar tu nombre
pero siempre enmudece…
tras la primera sílaba.
cuando seas regazo,
puerta,
fuego.
El piso está vacío,
silenciosas sombras
bordeándome las sienes.
Y este gato loco
sigue intentando
pronunciar tu nombre
pero siempre enmudece…
tras la primera sílaba.
CON TU NOMBRE DE REY
Tienes
una extraña adicción
a los andamios.
Hombre puntales,
recoge entre tus manos grandes
mi carne de palabra emocionada.
una extraña adicción
a los andamios.
Hombre puntales,
recoge entre tus manos grandes
mi carne de palabra emocionada.
CRONA
las palabras volaban
rojos filamentos
la cabeza hundida
en la almohada
elegir alguna
era sólo
cuestión de tiempo
rojos filamentos
la cabeza hundida
en la almohada
elegir alguna
era sólo
cuestión de tiempo
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