martes, 3 de junio de 2008

MIRANDO AL MAR


Hay una mujer sin piernas
sentada en el borde
de un banco de hierro
frente a la playa.

Hace tanto calor,
cascadas de sudor le caen
desde el cabello a la cintura.

Hay pájaros enmudecidos
revoloteando frenéticos
sobre su cabeza.

Espuma guerreando con la orilla,
ella quisiera ser
sólo un grano de arena.

Huele a mar,
azul, verdoso, viviente,
salado y peleón.

El sol esta furioso
o pletórico,
nunca se sabe,
pero abrasa.


Bucea silenciosa en el calor,
quiere ser una ola
que va y viene.

Pero está ahí
sentada sobre el banco,
quieta,
sin piernas.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Sólo el viento puede romper el tiempo. Sólo una palabra puede romper el silencio. Sólo un ciego puede verlo. Sentir una ola que rompe y se esconde. Sólo es un momento. Todo es un momento

Anónimo dijo...

El tiempo es sonar de pasos nítidos sobre el ruido.
A qué la letra cuando el ojo conoce los lenguajes.
Un momento,
un cúmulo minúsculo de instantes.
Y eso es todo.

Anónimo dijo...

Un momento. Un cúmulo minúsculo de instantes es un instante. Suficiente. Lo llevo dentro

Anónimo dijo...

¿Por qué habría de ser un instante? un cúmulo minúsculo de instantes sería un momento.quizá sobra minúsculo....Suficiente. dentro va.